jueves, 7 de enero de 2010

El grifo y el oso de la Fuente de Cibeles



Las esculturas del grifo y del oso fueron instaladas en el pilón de la Fuente de Cibeles en 1862 y su misión era facilitar el suministro de agua a aguadores, vecinos y viandantes, a través de los caños escondidos en sus bocas. Acompañaron a la diosa hasta 1895, año en el que la fuente abandonó su primitivo emplazamiento (junto a la verja del Palacio de Buenavista) para ocupar el centro de la plaza a la que da nombre.

Con el traslado, la fuente dejó de abastecer agua, con lo que el grifo y el oso perdieron toda utilidad. Las figuras fueron retiradas del monumento y depositadas en un primer momento en los almacenes de la villa. El grifo (animal fabuloso, mitad águila, mitad león) fue llevado posteriormente al patio central de la Casa de Cisneros, mientras que el oso terminó decorando los jardines de la desaparecida Casa de Fieras.

En la actualidad se exhiben en el Museo de los Orígenes, en la Plaza de San Andrés, lugar al que corresponden las dos fotografías inferiores. En la imagen superior, correspondiente a una xilografía de 1880, se observa la Fuente de Cibeles en su ubicación original y, en la parte izquierda del pilón, la escultura del grifo.



2 comentarios:

  1. sabes de algun grifo qe se haya hecho en el barroco? contesta si puedes por favor, gracias

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  2. Hola Anónimo:
    Siento no poder contestarte. Desconozco si, en el barroco, se hicieron grifos escultóricos. Un saludo!!

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